domingo, 17 de marzo de 2024

Ser mujer

 

Ser mujer significa dejar morir todo aquello que me dijeron que era. Quitarme la piel para volver a vestirme con las prendas que tejan o que elijan mis manos. Ser mujer es resignificar el cuerpo y la belleza. Conectar con la naturaleza cíclica de la menstruación y aprender que la linealidad no es cosa nuestra. Tratarme con cariño y respetar lo que necesito en cada fase. Ser mujer es romper estereotipos y creer en mis sueños, a pesar de la escasez de modelos de conducta. Ser mujer es redescubrir la historia, y aprender sobre mujeres asombrosas que gritan entre líneas que yo también puedo ser todo aquello que deseo.

miércoles, 31 de enero de 2024

Enero

Me estoy desnudando.

Veo el puñal en tu mano.

Palabras dulces salen de tus labios.

Tengo una duda,

¿para qué vas a usarlo?

Mientras dudo, abro el pecho

y sólo sé que, de momento,

sigo respirando.

martes, 26 de diciembre de 2023

Luna llena

 Por favor, no entres descalza;

he colgado mi esperanza

en la persona equivocada

y ahora hay trozos esparcidos

por todo mi universo.


Disculpa que no me levante,

tengo una daga clavada en el pecho

y si intento sacarla

la echo de menos.


Estoy escribiendo una carta

de lunares, que son lágrimas,

donde le pido al Sol que salga ya

y que no se espere a mañana.


Esta luna ilumina demasiado 

y me ha dejado ver todo aquello

que he estado ignorando.


Dos ángeles sostienen mis alas cansadas

y me acompañan a la cama

donde espero a que el Sol salga

otro día más.

martes, 19 de diciembre de 2023

De vuelta

 Tengo la sensación de no haber estado a salvo en mucho tiempo, a pesar de que a mi barrio no lo visitan bombarderos.


A veces, tengo la sensación de ser la única columna de mi techo. Y se me cansan los brazos de sostener mi propio peso.


Tengo la sensación de que me niego el dolor y así tengo que consolarme un poco menos.


Y si no miro las grietas de mis muros puede ser que contengan estas lágrimas durante más tiempo.


Y si no estiro mi espalda puede que siga sin darme cuenta de que cargo muchos pesos.


Y si no hidrato mis labios puede que no me dé cuenta de que me faltaron besos.


Tengo la sensación de que mis pies han sido amarrados al suelo,

y de que si ya no vuelo es porque por un momento perdí la conciencia de mi destino


Pero confío en mi silencio, respiro y me encuentro adentro, esperando.


Porque tengo la sensación de que a veces me pierdo pero sé que después siempre, siempre vuelvo.

sábado, 16 de diciembre de 2023

Cultivando la alegría

 Ya no sufro por nadie,
interiorizo el dolor,
lo proceso y doy frutos
de los que me alimento.

Enraizando mi cuerpo
alcanzo nuevos sentimientos
y aprendo de a poco
a ser yo.

Sufrir ya no se lleva,
ya no me eleva
a donde quiero habitar.

Vivo la vida en el gozo
y hoy no conozco ya pozo
donde me pudiera ahogar.

A mi camino le crecen flores;
a mis lluvias, caracoles,
y hay luciérnagas en mi oscuridad.

Doy las gracias cada día
cultivando la alegría
y las brujas, amigas mías,
me protegen con su amor.

Crecer sobre mis raíces

 Hay jirones de tu piel
que están asiéndose a la mía;
con ellos he recubierto
heridas que no tenía.

Pero ha pasado el invierno;
antes que él, el otoño,
y olvidé desprender
lo que me impide florecer.

¿Habrá que poner medida
a este amor,
y que florezca
en un arriate,

en lugar de dejar que
se expanda
en mis praderas
sin límite?

¿Será apego este dolor
que tapo con tu presencia?
¿Será que doy demasiado
y espero que sea de vuelta?

Quiero volver a mi equilibrio,
crecer sobre mis raíces,
y que sea mi lengua la que limpie
mis antiguas cicatrices.

miércoles, 6 de diciembre de 2023

Una ventana en el alma

 Tengo una ventana en el alma.

Mi nariz, pegada al cristal.

Mi alma está echa de aire

y entra y sale, entra y sale.

Desde el otro lado

se acerca a mirarme

y, cuando acercamos las frentes,

nos damos cuenta

de que somos iguales.

Armadura

 Estoy encerrada en una armadura de metal. La armadura me protege de todos los golpes y de los peligros externos pero también me impide acariciar caballos y recoger flores. Me impide sentir la brisa y recibir en mi piel los rayos del Sol.

¿Qué sentido tiene llevar armadura en este valle? Ahora que soy amiga de las ninfas y quieren posarse en mí las mariposas, ahora que quisiera bañarme en el río desnuda merece la pena correr el riesgo de morir si, hasta que ocurra, estoy viviendo.

Vengo de campos de batalla, de luchar contra gigantes y explorar hondas cavernas. Vengo de enfrentar monstruos y de cortar cabezas, y casi pierdo la mía. Vengo de luchar por causas propias y ajenas; me comprometí a salvar a todas las damiselas.

Pero ahora, que en este valle ya no hay batallas, ¿Sabré vivir la vida en paz? ¿Sabré dejar atrás sables y espadas?

Bueno, me quitaré la armadura para bañarme en el río, bailaré con las ninfas y las mariposas. Seré una guerrera retirada que aún, por costumbre, sigue llevando un cinto con su espada.